martes, 6 de marzo de 2007

Revolucionarios o institucionales

Es difícil el equilibrio entre el gobiernista y el revolucionario. Difícil, aunque no imposible ni inviable, cuando se trata de un gobierno que se ha propuesto echar las bases para una revolución profunda. Pero la contradicción está allí; se puede maquillar, esconder un rato tras la cortina, pero ahí está. Imposible desaparecerla.

La falla es de origen e indica que la Revolución (llámase a esto insurgencia y demolición de un poder establecido, junto con el modo de producción que lo hizo posible) nunca puede llegar a ser Gobierno, porque automáticamente deja de serlo. A menos que uno sea un cínico del coño y reproduzca en la denominación y en los gestos la acción del partido más aberrado de México y seguramente de América Latina, está claro que sólo puede haber una Revolución y es la que llevan a cabo los ciudadanos en ejercicio de su rebeldía. La discusión es vieja pero hay que traerla a la superficie de vez en cuando: eso de “Partido Revolucionario Institucional” es una patada en las bolas a la lógica, al respeto que se merecen los pueblos e incluso a la naturaleza de las instituciones, porque las Revoluciones se dan precisamente con el fin de acabar con las instituciones, cuando éstas caducan, se corrompen o estorban el natural desempeño de la gente común. Decir “revolucionario institucional” es una contradicción balurda, un oxímoron; es como decir fuego frío, hielo caliente, empresario socialista, División de Inteligencia Militar.

Las revoluciones se activan en contra del poder o en ausencia de un poder establecido; cuando cumplen su tarea de poner todo en su sitio (o de moverlo todo del sitio en que está) se esfuman y regresan a la cámara de hibernación de la Historia. Sucedió el 27 de febrero, ya ustedes saben en qué contexto y con qué potencia; sucedió también el 12 de abril: no bien se supo que ningún poder tenía el control de nada, porque el legítimo estaba secuestrado y el usurpador era una visita indeseable del pasado, hizo acto de presencia en la calle. El 14 en la madrugada desapareció nuevamente.

A Douglas Bravo le escuché una reflexión formidable en estos días: los Consejos Comunales no pueden ser una entidad revolucionaria porque han sido creados por un poder que tiene el control del Estado; y porque hay en el poder una entidad agradable, conveniente y simpática al pueblo. Las Revoluciones se dan sólo en oposición a algo contra lo cual sea necesario sublevarse. ¿Contra qué habrían de insurgir los Consejos Comunales, si el poder les es propicio?

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La respuesta está más o menos a la vista y hay que echar mano de ella para no ahogarnos en un vaso de agua: el Gobierno bolivariano no es un poder establecido sino un poder insurgente. Hay enemigos dentro del Gobierno, pero la solución a ello no es tumbar al Gobierno sino sacar de allí a los reaccionarios, a los que insisten en crear instancias y procedimientos adecos.

Con todo, es necesario también mirar hacia adentro con ojo implacable. Es triste que quienes estén haciendo mejor uso de las herramientas del nuevo tiempo sean la derecha, enquistada en algunos sectores de la sociedad dentro y fuera del Gobierno. Por ahí anda Leopoldo López agitando a los suyos para que se organicen en Consejos Comunales, y ellos, dóciles, organizados y metódicos por educación, casi por inclinación genética, han logrado ya conformar unos cuantos o están a punto de conformarlos; en la parroquia 23 de Enero, que tiene con qué exhibir su estandarte como parroquia con mejor organización de pueblo en Caracas, tiene problemas para conformar uno por cada bloque. ¿Nos ponemos las pilas o seguimos jugando a qué?

Va otra: en Anzoátegui, un grupo de la derecha chavista liderado por el inefable Luis Alfonso Dávila, acaba de activar un referendo revocatorio contra el gobernador Tarek William Saab. Que se merezca o no la revocación, el pueblo de Anzoátegui lo dirá. El punto es que la izquierda, quienes se supone que estamos del lado de la Revolución, hemos sido incapaces de activar ningún referendo a favor ni en contra de nada. Debe ser porque la tenemos fácil: Chávez es quien convoca o desmoviliza, el chavismo sólo tiene que aplaudirlo.

Honestamente, y a pecho pelao: ¿a ustedes les parece que eso está bien? ¿Es revolucionario un pueblo que sólo espera y acata instrucciones de un jefe máximo?


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Coda: está bien apoyar un Gobierno como el actual, que ha hecho que nunca en la historia como en este momento estemos tan cerca de una Revolución. Lo que está mal es creer que tanto muerto, tanta represión, tanto llanto y tanto exterminio, tuvo por objeto la conformación de “esto”: un Gobierno o estructura de poderes donde vegeta un cabeza e pipe como el “contralor” Russián, donde el diario emblemático sea un bodrio intragable como Vea y donde la Policía Metropolitana ahora dice ser revolucionaria, cuando lo procedente es que no haya policías.

A ver si nos enseriamos, o mejor nos embochinchamos: o el pueblo asalta el poder para que el nombre “democracia participativa y protagónica” deje de ser un eslogan, o dejamos los aspavientos y decretamos que este es un Gobierno convencional pero con buenas intenciones.

22 comentarios:

Kira Kariakin dijo...

Nunca he estado más de acuerdo contigo en un post. La diferencia es que desde el principio me pareció que no había nada de revolucionario en éeste gobierno, y lo han confirmado todos los vicios que se han repetido del pasado y magnificado por la obscena riqueza que está entrando al país.
La revolución para mí no está en cortar cabezas o acabar con una clase social, sino en empoderar a la gente para que tenga conciencia de que es dueña de su destino y de que ni un presidente, ni un ministro, ni un policía ni nadie es más que cada uno de nosotros y que estando en posiciones de poder su deber es responder a nuestras exigencias y trabajar en función de la gente que los eligió y no lo contrario.

Si este gobierno hubiera sido realmente revolucionario, en vez de perder tiempo en diátribas de odio y resentimiento hubiera pasado de la oposición que se ha manifestado inútil e inocua a la hora de las chiquitas concentrándose en taparle la boca con hechos, con obras de envergadura y resultados de mucho mayor impacto que lo que tenemos hoy después de 8, casi 9 años.

La gente bien pobre sigue siendo bien pobre, la inseguridad es mayor y la injusticia sigue rampante, así como la corrupción y el derroche saudita en gastos superfluos.

Yo no quiero volver al pasado. Pero este futuro que se perfila no me parece en el fondo tan diferente porque en el fondo todo se queda en blablabla en ejercicios de autoritarismo y megalomanía y dinero, demasiado dinero que no se sabe adonde va.

Cambiaron los actores y el escenario, pero la trama sigue más o menos igual como en todas las telenovelas.

romrod dijo...

esa es la verdadera actitud revolucionaria, soñar más allá de los adecos que siguen en el poder recetando medidas que fracasaron en el pasado. Hay que luchar por innovar y si es posible quitarle la máscara a más de un vivo que pulula en la actual oligarquía política. La verdadera revolución es la que fomenta la disidencia y la insurgencia de un poder nuevo, verdaderamente incluyente y diverso como el país mismo.
Un abrazo.

hectorpal dijo...

También de acuerdo con tu post, y de acuerdo con Kira.

Lo he dicho antes por aqui: el problema es la acumulación de poder. Eso de que este gobierno es una cosa transitoria al servicio de la revolución es una cosa que tu, JRD, te crees pero que hay que ver.

De hecho yo diria que lo unico revolucionario que ha tenido este gobierno es justamente la gente. Es decir, la gente se ha convencido mas de que pueden impactar. Ahora bien, el gobierno-chavez y el chavismo con todas sus heterogeidades, son variaciones de un mismo tema.

La gran pregunta es la siguiente. El gobierno revolucionario cree que hay que hacer una serie de acciones X. Cual de los siguientes escenarios es mejor:
1. Las hace como le da la gana, usando el poder acumulado de la mejor manera posible, para servir al pueblo, etc.
2. Las hace bajando el poder a todos, incluidos los opositores. Diseñando de manera que la garantia de que todo va bien sea el mismo pueblo, incluidos los opositores.

El gobierno ha optado sistematicamente por (1). Coincido con Kira en que hay que seguir mas por la (2).

Seguir por la (1) solo lleva a situaciones como las que describes. Poder acumulado, antitesis de cualquier cambio revolucionario o reforma profunda y duradera. Y luego, luchas por el poder, etc.

JRD dijo...

Kira. Ningún ensayo de cambios profundos puede hacerse sin que los beneficiarios del "orden" anterior se sientan perturbados. Te pido que me creas cuando te digo que he decidido no personalizar estas discusiones, pero prácticamente no hay otra forma de decir lo siguiente: 90% de la gente que protesta por todas las acciones del Gobierno actual no decía pío cuando los gobiernos de AD-Copei. Chávez no inventó el odio entre las clases, sólo que antes, cuando las clases que se sienten predestinadas a ejercer funciones de dominación mantenían a los pobres adormecidos a punta de policía, televisión y elecciones, la sensación era de paz. Al menos allá en las urbanizaciones y en los medios, porque en los barrios la historia era otra.
No es excusa esa frase hecha según la cual "este Gobierno es peor que los anteriores". Porque no lo es. Tampoco es más represivo ni más tiránico. Hoy los venezolanos pobres podemos actuar en docenas de formas de organización que antes eran criminalizadas, perseguidas y reprimidas. Yo sé de persecuciones. Yo sé de ejercicio brutal del poder. Yo sé de allanamientos y de carcelazos por el "delito" de vivir en un sector que según la policía estaba "lleno de ñángaras". Yo conozco docenas de compas que sí fueron presos políticos, pero los medios jamás dijeron una maldita palabra al respecto: cuando un pobre o un comunista va preso por lo que piensa y dice, la sociedad está en orden; cuando a un señor empresario o alguien de clase media recibe unos gritos por televisión entonces eso es "perder el tiempo en diatribas de odio y resentimiento", y "Autoritarismo, megalomanía y dinero".
Yo no he visto en estos años a ningún cuerpo policial haciendo redadas en las zonas de clase media. Aun así, reconozco tu derecho y el de cualquier venezolano a decir que se siente perseguido por una tiranía. Pero persecución, lo que se llama persecución, mi estimada...

RomRod, estoy de acuerdo con tu comentario, palabra por palabra.

HLp. Ciertamente, mantenerse en una acera es un acto de fe. Si yo fuera futurólogo le apostaría desde ya a quien va a hacer las cosas "bien". Yo no sé cómo va a ser este Gobierno dentro de diez años. Pero apuesto a que podremos mejorarlo desde abajo.
En cuanto a las opciones que planteas como probables, no me quedo con ninguna, porque el poder no es una cosa que el Gobierno "le baja" a la gente. Creo que la gente debe apropiarse de "eso", o seguimos entrampados. No sé si has pensado en esa contradicción (que seguramente es inconsciente, lo cual la hace más dura de enfrentar): hay quien opina que este es un Gobierno tiránico y dictatorial, pero sigue pensando que si la gente no tiene poder es porque el Gobierno no lo "empodera". Y eso de "empoderar" ¿no es el reconocimiento de que el Gobierno es el dueño del poder y que éste tiene que hacernos el favor de regalarnos un poquito para ver a qué sabe?

hectorpal dijo...

JRD, es probable que podamos encontrar una definición de empoderamiento que no pase por pedirle un poquito-de-poder-por-el-amor-de-Dios a papá-gobierno.

Podriamos verlo como que los ciudadanos logren que el Estado tenga menos poder, teniendolo ellos. No se trata de pedirle permiso. No se trata de elegir un gobierno buena gente, que me entienda, y que se ria conmigo. Esas cosas podrían ayudar o no.

Se trata de que tengamos en efecto dicho poder, todos eso si. A mi eso me suena revolucionario y además inclusivo, sin distinción a priori entre un bando u otro.

Respecto a tu respuesta a Kira, yo se de la profunda hipocrecía de la mayoría de los voceros opositores y gran parte del pueblo llano. Pero no se trata de repetir lo que hacen los demás. El problema es que muchas veces se argumenta como tu, y luego eso justifica cualquier acción. Cuando eso además se hace en nombre de los pobres, a mi es que me jode, me jode un montón.

Esta discusión promete.

saludos.

Lorenzo Albano F. dijo...

Las contradicciones de quienes quieren tumbar el Poder y con la opresion constituyendose ellos mismos en un Poder dictatorial y opresor no dejaran nunca de impresionarme y divertirme...

Con mala fortuna, por esta ruta lo que veremos es una repeticion de la lamentable experiencia sovietica.

La solucion mas simple es la mejor... Por eso soy libertario.

Para adelgazar o matar al Estado lo que hace falta es quitarle los dientes. Sin dientes no depreda y si no come... bueno.

JRD dijo...

Qué interesante, Albano, a mí también me dan risa esos especímenes: dicen odiar al Estado por opresivo pero quieren crear la dictadura de los empresarios. Y además de eso se hacen llamar "libertarios". Para carcajearse.

Lorenzo Albano F. dijo...

La tirania de los empresarios?

No se que experiencia tendras tu,

pero en el 99% de las veces que alguien me ha obligado a pagar algo que yo no hubiera contratado, obligado a comprar algo, obligado a levantarme en la madrugada para hacer tramites que bien podria quedarme en mi casa que hacerlos, multado...

y en el 100% de las veces que alguien me ha cacheado, revisado las maletas, apuntado con un arma por la calle, lanzado sobre mi bombas lacrimogenas etc. etc. etc.

se trataba del Estado y de sus empleados.

Anónimo dijo...

Ni que decir de ese vocablo tan reaccionario como es "empoderamiento"(empowerment).Un anglicismo jalado por los cabellos por la intelectualidad académica, que connota que la gente no tiene ningún tipo de recurso, poder o capacidades para transformar la realidad social; que subestima,pues. En Guarenas (donde nació la revolución,humildemente)hemos logrado, también humildemente, conformar algunos consejos comunales.No con el fin de obtener poder, sino con el fin de emanciparnos de éste. De lograr autonomía en las decisiones que tomemos y ejercer un libre control sobre nuestras vidas, transformar los aspectos opresivos de la realidad y esto incluye a las instituciones.Lo más difícil de esta revolución, y no digo nada nuevo, es cambiar los patrones y esteritipos culturales (impuestos, hegemónico, de clase, de castas,construidos o como los quieran llamar)que hacen que exista gente, a estas alturas del partido, que se encuentre en actitud contemplativa observando la vaina pa´ver si es una revolución o no. O que crea que para ser revolucionario sólo basta repetir el discurso de Chávez, desde cualquier institución cuartorepublicana o instancia de poder.Ambas actitudes son bastante reaccionarias, pero la contemplativa es la más ajena a los procesos transformativos de organización social actual, no los conoce ni participa de ellos, no tiene calle (sólo TV), sólo critica a mansalva y sin conocimiento de causa.Irresponsablemente y sin compromiso con nada.Esta actitud cuenta con un discurso pleno de argumentos mediáticos distanciados de la gente, su contexto y del saber del sentido común y denota la incapacidad de algunos sectores sociales para comprender las acciones gubernamentales que pueden desencadenar transformaciones sociales y bienestar colectivo.Esta especie de tara produce en ellos ese sentimiento de frustación y exclusión, que expresan algunos en este espacio de discusión, y que tratan de legitimar echándole la culpa al discurso de Chávez, en lugar de intentar comprender que la participación y el protagonismo no se decretan se construyen en la acción, revolucionaria por supuesto.Los consejos comunales son sólo un recurso que podemos utilizar para la transformación social.No son la revolución.El gobierno quizás sólo tenga la competencia de crear políticas que pueden resultar revolucionarias (o no?); como la que coadyuva a una distribución más justa de la riqueza,a través de la creación de una nueva instituionalidad, por ejemplo, y es allí donde se insertan los consejos comunales. Pero la revolución la hacemos nosotros, no la figura de consejo comunal.Por acá somos revolucionarios hitóricos, de conciencia y convicción. Quiero decir; somos revolucionarios mucho antes que Chávez llegara al poder y se sintonizara con nosotros. Además, no hemos perdido la capacidad de reconocer cuando la institucionalidad gubernamental "revolucionaria"(?)o no, bastante ineficiente por estos lares del poder local suburbano, se convierte en una trituradora de conciencias. Nuestro objetivo no es el poder sino la transformación y la emancipación social. De tal manera que la militancia aduladora nos las pasamos por el forro.No sirve.Así que no nos queda otra, y esto puede ser un remedio contra el sentimiento irracional de frustación, confusión y exclusión de algunos sectores, que mover esas nalgas y meternos en la candela.Una vez más.

Anónimo dijo...

si todos pusieramos manos a la obra y dejaramos de escribir tanta paja estoy seguro de que las cosas cambiarian.nosotros solo vivimos en un espacio de tiempo que se nos ha presentado para que asumamos nuestras responzabilidades y actuamos.el asunto es quien lo hace.ninguno.tenemos miedo.miedo a que nos llamen contras o escualidos.preferimos esperar a que esa gram impocion social que se avecina sea impulsada por otro,porque a la pinga si me monto yo me va a ir mal.si no aprovechamos este espacio en la historia que nos ha tocado vivir e impulsamos los cambios desde abajo algun dia las historia nos lo cobrara.Bueno,a lo mejor me equivoco y cuando todo se valla a la mierda nosotros los que escribimos tanta paja nos encontraremos igual: solo escribiendo pajas.

hectorpal dijo...

Anonimo, yo lo unico que se es que para volar hace falta estar conciente de que la Graverdad te jala pa abajo, quieras o no, te acuerdes o no. Y que la unica manera de subier es tener alguna cosa que te permita resistir e ir en otra dirección.

Llamalo como quieras.

JRD dijo...

Lorenzo. Ese Estado al que desprecias enriqueció y sigue enriqueciendo a muchos miles de empresarios que se la dan de liberales puros, pero cuyas fortunas tuvieron su origen y plataforma en el Estado burgués. Así que todas esas manifestaciones de la tiranía estatal, toda esa opresión y esas agresiones, han tenido por objeto cuidar de la propiedad de los ricos, los empresarios. La policía es una creación del Estado burgués, y las instrucciones básicas a sus funcionarios parten de aquí: "Sujeto pobre, igualito a ti, que veas cerca de la propiedad de los ricos, me le pides la cédula y me le preguntas dónde vive; si vive en Catia y no puede explicar qué está haciendo en Santa Mónica, me lo detienes y me lo coñaceas".

Convéncete: NO EXISTEN los liberales puros en Venezuela. Existen unos multimillonarios parásitos de un Estado que les regaló una parte de las riquezas de la nación. La otra parte se la llevaron las potencias. Ese Estado que dices odiar enriqueció a los "empresarios privados" que admiras y además les creó unas leyes y unas policías para mantenernos a raya a los pobres. No te engañes. Tú no eres libertario. Eres alguien que suspira por que ese Estado funcione.

Anónimo dijo...

De acuerdo, entonces vayamos punto por punto.
¿Se puede hacer algo por Vea, por ejemplo, o le seguirán dando financiamiento a esos explotadores?
¿Será que VTV empieza a cubrir sucesos o seguirán haciendo silencio? ¿Quién mete la mano si a uno como Walter se lo cargaron, y a los que no quisieron leer su despedida?

Además, me sigue pareciendo que todo este peo político, por más cimientos que haya movido, todavía no ha podido siquiera dejar de ser una discusión caraqueña. Las periferias seguimos marginadas de todo este peo. Si ves a los consejales de aquí, le entrarías a carajazos de una vez, uno más borracho que otro, haciéndose llamar Poder.
De verdad, a veces la figura misma de Chávez me sabe a porra cuando las comunidades no están en la capacidad de resolver su propio problema. Es decir, hay muchísima gente a la que le falta ser "revolucionaria", o la palabra que quieras ponerle, de la boca para adentro, de la casa para adentro.

JRD dijo...

LuisCarlos. Te invito a leer los primeros párrafos del artículo, no para que te creas su contenido sino para que des con algunas pistas. Por ejemplo: los Gobiernos no hacen revoluciones, las hacemos los ciudadanos. De modo que si los concejales de los que hablas no sirven ¿qué están esperando las víctimas directas de su ineptitud? ¿Que Chávez los bote? ¿Y por qué no lo hacen allá en la localidad? ¿Has oído hablar de la Misión Boves? ¿Nos vemos en estos días y te cuento?

Creo que aplica igual para lo demás: ¿no te gustan VTV y VEa? Lánzate a hacer la televisión y el periodismo que te gusta. Herramientas y vías para hacerlo las hay por coñazos, y ya mucha gente las ha activado. Si sigues esperando que la mentalidad conservadora que ha hecho posible esos medios van a corregir el rumbo, entonces deberías corregir tu percepción: no es "Las periferias seguimos marginadas de todo este peo", sino "Algunos miemvros de la periferia nos automarginamos de todo este peo".

Mi papá me lo decía de otra forma, cuando chamo: "Pídala, mijo, usted no sabe cuándo están a pundo de dársela". Funciona igual aquí: no esperes que el Gobierno te regale el periodismo que quieres, échale bolas y hazlo, que es más fácil de lo que parece.

Ah bueno, y no fue un buen ejemplo el de Walter Martínez: a este gafo lo botaron por prepotente y jalabolas. El tipo se puso a llorar porque en lugar de enviarlo a él a cubrir la actividad de Chávez en la ONU pusieron a un muchacho.
No me digas que tú eres de los que piensan que al tipo lo botaron porque sabía de muchos casos de corrupción...

hectorpal dijo...

JRD, vale asumamos que el cambio comienza por la gente.

Pero es un gran simplificacion que la unica accion posible de la gente es hacer las cosas por si mismo, como le dices a LuisCarlos.

Hay algunas cosas muy grandes cuyo camino natural es ir por vias que permitan reunir fuerzas para hacer algo. No me pidas un esfuerzo revolucionario de masas para hacer una alternativa a Vea o VTV. Eso es dejarme en la impotencia, y podria ser incluso un discurso destinado a que nada cambie.

Una población revolucionaria en la práctica, vigila y presiona al Estado para que no la cague. Ahora bien. Si por ejemplo, si nos unimos varios y pedimos que VTV cubra sucesos, ¿pasaría algo?. ¿Tu te unirias? Me gustó lo de sucesos porque es una cosa inobjetable. Si hay problemas serios en el pais lo suficientemente grave para que alguien muera, eso deberia ser noticia de parte de la televisora del Estado.

Verás... yo estoy dipuesto a hacer algo, pero se que el gobierno no me va a parar medio e bolas porque ellos tienen su agenda. Entonces, gente como tu, en la práctica, están dejando que VTV siga como siga. En la práctica hay nulos incentivos de organización para decir una opinión crítica, tendiente a mejorar, incluso desde el mismo chavismo.

Entoces si este gobierno se comporta así, ¿sigue siendo un mal menor?, ¿sigue siendo la unica posibilidad de acercarse a la revolución real? Tonterias...

Si es que lograr que lo que la gente piensa salga a la luz es parte esencial de una revolución, y este gobierno solo escucha las cosas que encajan, se puede hablar de un gobierno revolucionario? Tonterias....

A mi se me desvanecen las posibles diferencias con otros gobiernos. Es solo más de lo mismo, y de paso la gente que podría ayudar a buscar otra alternativas sigue comiendo moscas... pensando que esto es un paso adelante, cuando lo que podemos tener es un efecto rebote. Si el dia de mañana tenemos que un ácido gobierno de derechas, esta será una de las razones.

Kira Kariakin dijo...

Epale, creo que nunca dije que me sintiera perseguida... No lo siento y mucho menos desde Bangladesh :).

Punto por punto:

"90% de la gente que protesta por todas las acciones del Gobierno actual no decía pío cuando los gobiernos de AD-Copei."

Cierto.
Muchos de los sequidores de la oposición de hoy no movieron un dedo en el pasado, creo también cierto que de alguna manera esperaban un cambio radical en cuanto a justicia, seguridad, orden en las instituciones del estado y castigo a la corrupción. La clase media opositora sobre todo, porque esa fue la principal oferta de campaña del 98. Yo, sin ser chavista, sinceramente esperaba un cambio más impactante para los pobres en cuanto a oportunidades, seguridad y garantías. Un gobierno más correcto siguiendo las leyes que restableciera la honestidad como valor y la justicia como norma tanto dentro como fuera de tribunales, dando ejemplo.

"Chávez no inventó el odio entre las clases, sólo que antes, cuando las clases que se sienten predestinadas a ejercer funciones de dominación mantenían a los pobres adormecidos a punta de policía, televisión y elecciones, la sensación era de paz. Al menos allá en las urbanizaciones y en los medios, porque en los barrios la historia era otra."

Más o menos cierto. Las "clases predestinadas" al poder... siempre se exaltó la extracción popular de todos los candidatos y presidentes con las excepciones de Caldera y Eduardo Fernández en los cuarenta años de democracia previas. No sé cual es esa clase porque ciertamente nunca me sentí parte de nada que fuera a mandar en el país. Que yo sepa dicha la policía la manejaban los gobiernos y los gobiernos hasta donde sabemos fueron elegidos por la mayoría. Los Otero se decían comunistas y las televisoras se plegaban al gobierno de turno al igual que tooodos los medios.

"No es excusa esa frase hecha según la cual "este Gobierno es peor que los anteriores". Porque no lo es. Tampoco es más represivo ni más tiránico. Hoy los venezolanos pobres podemos actuar en docenas de formas de organización que antes eran criminalizadas, perseguidas y reprimidas."

Cierto. No creo que este gobierno sea más tiránico que los anteriores. Sólo que ahora como dices afecta a quienes antes no afectaba sobre todo si deciden no acomodarse con el poder. Bastará con que dichas organizaciones que mencionas comiencen a hacer cuestionamientos de raíz y se cansen de las mismas injusticias, quizás entonces sea igual o más tiránico que los anteriores. Si me equivoco con el futuro con gusto me tragaré mis palabras.

"Yo sé de persecuciones. Yo sé de ejercicio brutal del poder. Yo sé de allanamientos y de carcelazos por el "delito" de vivir en un sector que según la policía estaba "lleno de ñángaras". Yo conozco docenas de compas que sí fueron presos políticos, pero los medios jamás dijeron una maldita palabra al respecto: cuando un pobre o un comunista va preso por lo que piensa y dice, la sociedad está en orden; cuando a un señor empresario o alguien de clase media recibe unos gritos por televisión entonces eso es "perder el tiempo en diatribas de odio y resentimiento", y "Autoritarismo, megalomanía y dinero"..."

No creo que se puedan justificar las carencias de hoy con las de ayer. El autoritarismo diría incluso que afectará a más gente ahora, porque cuando las agrupaciones que se formen a tratar sus problemas creativamente y con las herramientas que se le han dado empiecen a denunciar y a reclamar, se destapará la verdad de todo lo que corrompe la disposición de dinero a manos llenas mientras se está en el poder.

Cuando digo "de odio y resentimiento, autoritarismo, magalomanía y dinero," no me refiero nada más al presidente. Odio y resentimiento me refiero cuando se habla de escuálidos por haber ido a una universidad o de extranjeros a aquellos que nacimos en Vzla. de padres inmigrantes. Los insultos y descalificaciones. No a si se odia a los Granier, a los Otero o a los Cisneros o a Bush, quienes me tienen sin cuidado.

Megalomanía... ¿Aló presidente todos los días te parece de verdad que no es cercano a la megalomanía o fotos en cada valla del interior diciendo que gracias a él y el alcalde o gobernador sutano hay una carretera o un pequeño dispensario, en vez de darle crédito al ministerio o institución correspondientes, o la elección indefinida o cambiar la constitución menos 9 artículos, o la superhabilitante...? Está bien. Lo retiro justifiquémoslo como promoción y medidas necesarias para la revolución, pero no me parece serio...

Y no, no viví en un barrio y no sé en carne propia lo que puede ser vivir en uno o ser perseguida. Ni tampoco tiré piedras en las puertas de la UCV de Plaza Venezuela y mi activismo fue bastante limitado cuando estudiante y casi nulo luego hasta hace 9 años. Me limitaba a trabajar en el sector cultural de la mejor manera posible y honestamente. Pero tampoco viví en una mansión. Y no tengo nada en la cuenta de ahorros ¿Hace ello tu experiencia más valida que la mía en querer un país más justo? ¿Me hace quererlo menos? ¿Me descalifica al no querer que tus hijos pasen por las experiencias que tú pasaste que si bien te curtieron, educaron en la vida y te hicieron la persona coherente y responsable que eres hoy, quizás hubieras preferido no tenerlas o quizás no quieras que tus hijos las vivan? ... El hecho de que yo no haya tenido tus experiencias y de que venga de la clase media no me hace insensible al país o a la gente y sus problemas... No quiero que nadie sea perseguido bajo ninguna circunstancia y que la protesta sea escuchada y no reprimida venga de donde venga.

"Yo no he visto en estos años a ningún cuerpo policial haciendo redadas en las zonas de clase media. Aun así, reconozco tu derecho y el de cualquier venezolano a decir que se siente perseguido por una tiranía. Pero persecución, lo que se llama persecución, mi estimada..."

Ya dije que no me siento perseguida. Pero hay otros que sí se sienten así, por protestar, por tomar la plaza de altamira, por ponerse en huelga, por firmar en un referendo, etc.
La policía no hace redadas en urbanizaciones es verdad. Tampoco andan vigilando, ni en urbanizaciones ni barrios. Muertos tenemos todos por el crimen.

Tiranía es una palabra fuerte y no la he usado, porque confío en las garantías constitucionales aún vigentes.

Autoritarismo sí. Porque se habla de un comandante y no un presidente. De ejércitos de civiles y revolucionarios en vez de población. Porque en repetidas ocasiones se dice que con Chávez todo, sin él nada, socialismo o muerte, etc. Y ahora que todas las leyes dependen de él, ya ni siquiera la asamblea... pues no sé me parece obvio el corte autoritario donde la última palabra no la tiene sino él.

......
El resentimiento de clases existe desde siempre y en todos lados. Pero ¿necesita éste realmente ser exacerbado, sobre todo cuando tanto el presidente y su camarilla de ministros, alcaldes, asambleístas y gobernadores, no son pobres ahora y en muchos casos jamás lo fueron? ¿Predican ellos con el ejemplo?
El odio de clases existe, y las diferencias también. Para mí lo lógico es reducir ambos, tanto odios como diferencias.
.................

Lo que sí es cierto e innegable y aplaudible desde todo punto de vista es el vigor que ha ganado la gente en asumirse como fuerza de cambio de su circunstancia, lo cual a todas luces le hacía falta con chavismo o sin él. Ese vigor que abarca hasta a las antes apáticas clases sociales (por no decir empoderamiento) es la verdadera oposición para Chávez. Porque la gente será cada vez más vigilante de que se garanticen sus derechos. La semilla de esa revolución se sembró y ni él la podrá parar.

Este factor fue usado por Chávez para su trabajo político quién en un principio me parecía genuinamente preocupado por promover la autoestima de la gente y la valoración de su propia fuerza. Hoy creo que su ego domina sus iniciales intenciones. Y por ello no es ya revolucionario sino "oficial".

Aquello que es revolucionario no puede jamás ser status quo porque las revoluciones demandan cambios constantes y drásticos.

Liderar una verdadera revolución tendría que ser un acto de desprendimiento y no de acumulación de poder.

Pero bueno creo que en todo esta discusión nos motiva una sola cosa que es el amor por nuestro pais y el genuino deseo de que eche palante. El palante puede ser controversial, pero sin duda lo que vaya a brindar bienestar esté fundado en la ideología que esté es mejor que nada en lo absoluto.

JRD dijo...

Bueno, Kira, qué te puedo decir sino que recojo en esencia tu penúltimo párrafo. Y propongo corregir uno anterior: "El odio de clases existe, y las diferencias también. Para mí lo lógico es reducir ambos, tanto odios como diferencias". El problema es que la existencia de una clase es un insulto a la otra. No se puede convivir cuando el confort de unos pocos se sostiene sobre la miseria de la mayoría.

Por lo demás, veo que a pesar de mi petición inicial no aguantaste las ganas de sentirte aludida personalmente. Creo que será difícil que creas cuando te diga que no estaba hablando de ti sino de un impulso vesánico de clase. ¿Te afecta lo que se dice de esa clase? Bueno, sigue siendo general y no personal mi señalamiento. Al final, creer en las palabras del otro, creer en una revolución o creer en un camino no tiene que ver con la elocuencia o las artes de la seducción, sino con un acto de fe: crees o no crees. Nadie tiene derecho a tratar de corregirte en tu trinchera.
Sigues siendo bienvenida a argumentar aquí tus desacuerdos.

Kira Kariakin dijo...

La verdad es que no me sentí agredida si a ello te refieres :), sólo respondí a tu comentario cuando hablaste de tu propia experiencia personal.
A mí no me parece mal o incorrecto hablar desde la experiencia porque eso es lo que nos construye y configura. Hablar en frío de lo que ocurre en el país no se puede porque nos alude a todos constantemente. El quid está en seguirnos apreciando y entendiendo desde cada orilla. Yo respeto mucho lo que dices justamente porque hablas desde tu experiencia como activista, periodista, militante, porque te considero coherente y cosecuente y gracias a mis lecturas por acá he logrado ver las cosas desde otro punto de vista y creo que he expandido mi visión de lo que ocurre en Venezuela.

Por supuesto, no pretendo conversando acá cambiarte ni extraerte de tu trinchera ni creo que me vaya a salir de la mía gracias a lo que me digas. Admiro que la tuya se mantenga a pesar de las circunstancias. Y admiro a la gente que trabaja por su comunidad y por sobre todo que piensa en función de ella, no en lo que va a obtener si está o no con un partido. Y es verdad, no puede haber una clase a costa de la miseria de otra. También estoy de acuerdo con ello. Sobre todo porque la miseria es extrema e indigna en todo el planeta y uno tiene que hacer lo posible por reducirla desde lo poquito o mucho que uno pueda aportar.
Bueno no pude evitar ponerme personal para decirte que no me tomo las cosas a lo personal a lo malo, sino bien.
Y que en este post en particular sigo estando de acuerdo y que refrendo lo dicho por romrod.

Lorenzo Albano F. dijo...

Yo no admiro a nadie. No tanto como para darle algo mio a cambio de nada porque habla muy bonito.

No admiro al Sr. A por venderme mas barato o mejor que el Sr B. . Aprecio sus esfuerzos comprandole o no comprandole. Esceptico de lo que dicen A o B, lo sere siempre.

No le regalo mi dinero y mi libertad como pretendes que haga con los politicos, sea como sea que se hagan llamar: revolucionarios, institucionales, etc... todo es lo mismo. Me proponen algo, pero si esconden los costos y no aseguran calidad, no son sino estafadores.

Detesto a los estafadores y a quienes usan la violencia para quitarme lo que me pertenece y concierne.

El politico que te ofrece algo implicando que no cuesta dinero o libertad es un condenado estafador. Porque el dinero y el poder del Estado no salen del vacio, salen de las espaldas de la gente. Ciudadano, por cierto, es quien es consciente del hecho que nada es gratis, y mucho menos en lo que concierne a la libertad personal, al dinero y al poder.

Los "empresarios" parasitos del Estado son parasitos de los estafadores de siempre, que prometieron proteger la "industria nacional" coartando el comercio para beneficiar a personas que no querian competir, o crearon patronazgos con dinero malversado del erario publico.

Anónimo dijo...

Suena extraño decir que desde Bangladesh o cualquier otro punto del globo terráqueo podemos tener una mejor visión del país que estando aquí, metidos en la candela.Siendo Chavista y pobre creo que sólo preguntádole a los sujetos beneficiarios de las medidas sociales del actual gobierno podremos saber su impacto.

Carmela

Anónimo dijo...

A cuáles circunstancias se referirá Kira cuando habla de la trinchera de JRD y dice: "Admiro que la tuya se mantenga a pesar de las circunstancias".

Kira Kariakin dijo...

Aclarando:
Cuando dije leyendo acá no me refería a Bangladesh (en general cuando visito blogs de Venezuela siento que estoy allí)... me refería a acá, este lugar-blog que es el discurso del Oeste... lo que era antes la casa del perro. En suma acá en este espacio de JRD.

Las circuanstancias que hacen que JRD ande cuestionando cosas que están pasando con el manejo del poder, injusticias, vicios de corrupción que persisten, etc... y que le permiten seguir manteniendo convicciones revolucionarias y fe en este proceso y su líder que una buena parte del país llama revolución...

Espero haber aclarado los dos puntos.