martes, 13 de noviembre de 2007

Este es el monigote fascista que los "demócratas" adoran



6 comentarios:

Anónimo dijo...

Sinceramente, creo que estás pelado. No me parece que la gente aquí "adore" al Rey Juan Carlos, que la verdad a mi me importa un carajo lo que haga o deje de hacer. Y me parece que, si a ver vamos, el tipo actuó mal, se salió de sus casillas y se comportó como un patán, al igual que se estaba comportando Chávez al meterse una y otra vez a interrumpir a Zapatero.

Lo que nos mata de la risa es que le haya mandado a callar la boca a Chávez como se la calló, y más aún que el señor presidente diga ahora que no oyó. Que vaina más buena, ahora es sordo.

Fíjate que cosa tan arrecha Duque. A Chávez le molesta mucho que Aznar -que en estos momentos es solo un ciudadano español- vaya por el mundo diciendo que Venezuela es un desastre y que su presidente un pichón de dictador. Es su opinión, más nada. Y mosca: Aznar fue un cabrón el 12 de abril, cuando luego del decreto no dijo un coño, ni él ni su gobierno. En fin, eso le saca la piedra, tanto que le pide a Zapatero que le diga a Aznar que respete.

Pero él vive, día tras día, insultando al presidente de Estados Unidos (que es un grandísimo comemierda) y a cuanto gobernante no esté de acuerdo con su épica bolivariana, sin hablar de los insultos que todos los días espeta a cualquiera que no comulgue con él, un 45% de los venezolanos, más o menos. A algunos los ataca directamente y otros sin nombrarlos.

Entonces, me pregunto yo, ¿cómo es la vaina?

De bolas, es como decía alguien por ahí, si tu eres de izquierda no hay peo. Por eso para muchos Fidel es un carajo de pinga y Pinochet un asesino fachista, cuando lo único cierto es que son (o fueron, porque el chileno peló bolas) un par de asesinos.

Pero obvio, venden la vaina como esa lamentable canción de Silvio Rodríguez en la que el carajo "iba matando canallas con su cañón de futuro".

La vaina es igual pal pavo que pa la pava, compa.

Eduardo Martínez

Anónimo dijo...

Panas: no se pierdan la revista Hola del próximo mes. Viene mínimo con dos reportajes sobre la monárquica prepotencia y la charlatanería comunista.

Anónimo dijo...

Él se calló pero apeló al recurso tardío y cobardón de decir que no oyó en el momento. Si él miente ante la videística evidencia ¿qué será en tratándose de otros políticos y oscuros menesteres? ¿Será que una menos explícita monstruosidad también puede ser embellecida con las maromas de oficio y las interpretaciones tramposas?

Ahora bien, si la integridad moral del presidente es inmune a sus propias falsedades y pequeñeces personales debe decretarse una ley que así lo estipule. Sólo de ese modo estaríamos seguros de opinar-en-el-marco-de-la-ley.

JRD dijo...

Ajá. Ese es oyro automojón que los demócratas-monarquistas han querido zamparse: que el "rey" mandó a callar al negro y el negro se calló.
El estúpido que escribió aquí arriba bajo anonimato (y que envió además otros 30 comentarios insultantes para hacerme creer que hay muuuucha gente que piensa como él) habla de una fulana la videística evidencia. Pues bien, aquí se la vuelvo a colocar:

"¿Por qué no te callas?"

¿Será que después de volver a verla este gafo insistirá en que Chávez se calló como se lo ordenaba el nuevo ídolo de la derecha venezolana?

Anónimo dijo...

Si hay algo que se le pueda criticar a Chávez en esa cumbre, es ciertamente la interrupción a Zapatero, pero esas cosas como muchas veces pasa en este tipo de eventos son consideradas como incidentes que no tienen, ni dejan secuelas, y que no dejan de ser anécdotas de eventos. Ahora bien, si dejáramos de discutir tal y como nos los plantean la superficialidad con que los medios nacionales e internacionales, sobre todos los medios españoles que han y están tratando el tema, y fuésemos al fondo o trasfondo del asunto, discutiríamos de una vez, que la molestia tanto del Zapatero como la del rey no fueron por los adjetivos de Chávez a su compatriota Aznar.

Pongo algunas de las que la gente seria está discutiendo:

Zapatero quiso poner la guinda al encuentro dictando las pautas de cómo deben ser adoptado las recetas del mercado, el tipo quiso dar cátedra del liberalismo puro, de esos que sólo le ha funcionado a las multinacionales.

Estas me llegaron por ahí:

1) Desembarca en Santiago, para participar en el encuentro empresarial paralelo a la XVII Cumbre Iberoamericana, el presidente de la CEOE (central patronal-empresarial española) y connotado Aznarista, Gerardo Díaz Ferrán con el claro empeño de “monopolizar” y empujar un texto conclusiones -con sello Aznar (gran lobbista de capitales trasnacionales)-, con loas al neoliberalismo y la privatización como única vía para la “¿cohesión?” social. El personaje, lejos de propiciar consenso o cohesión alguna, fustigó en intervenciones privadas entre empresarios a los modelos “estatistas y populistas que alejan las inversiones extranjeras”. Ello implica una crítica inmerecida al proceso bolivariano que por supuesto fue del conocimiento de los Presidentes revolucionarios.

2) Este hecho generó el natural malestar de varias delegaciones, entre ellas la venezolana, por la impronta del señor Aznar quien, como claramente lo denunció el Presidente Chávez, ha creado un “club de ex presidentes que denigran y endilgan los más descalificadotes epítetos para con el líder de la Revolución Bolivariana en cuanto foro y seminario son invitados.

3) Las denuncias del primer día de sesiones de la Cumbre que formula el presidente Chávez contra el ex Presidente Aznar, responden por tanto a su intervencionismo manifiesto en la Cumbre de Santiago valiéndose de sus lacayos empresarios y es una patriótica respuesta a las declaraciones recientes del ex presidente español; eso sí, siempre aclaró el Presidente Chávez que ni se refería al pueblo español, ni a su Gobierno, cuando calificó de fascista a quien -desde el Palacio de la Moncloa- se confabuló con el gobierno de George Bush para auspiciar el golpe de Estado del 2002 y quedó como constatación histórica que solo dos embajadores asistieron al acto de auto-juramentación del dictador Carmona (el embajador de USA y el del Reino de España).

4) La noche de ese primer día de Cumbre, correspondió a los Presidentes Chávez y Aznar compartir mesa y lo que llama la atención es que el Presidente Zapatero no hizo reclamo alguno, por lo que causó sorpresa que el Canciller Moratinos se comunicara al término de la cena, con el canciller Nicolás Maduro para trasmitir la molestia del Gobierno español por la mención a Aznar en la sesión del día. Dato que no es menor y que obviamente para líderes que se conducen siempre de manera franca y transparentemente no deja de causar extrañeza y molestia. De ahí la reafirmación de la protesta contra Aznar que el Presidente Chávez efectúa en el segundo día de la Cumbre.

5) En las cumbres se acostumbra a un encuentro privado dando oportunidad para que los mandatarios intercambien sin las ataduras que imponen un debate público. Es un pacto asumido que, lo que allí se discute allí se queda. Es en el retiro donde de verdad se discuten los asuntos de fondos, los consensos y los disensos. Zapatero en el retiro mantuvo silencio ante la crítica de Ortega y Morales por la inmoralidad de las empresas españolas, ello por supuesto molestó a Zapatero y al Rey. Sorprendió Zapatero entonces, trayendo a plenaria asuntos que habían sido discutidos en el retiro, entre ellas, criticando el empeño de Latinoamérica en traer al redil de la justicia y someter a nuestros intereses nacionales a las empresas hispanas.

No quedan dudas de que el estamento neoliberal maniobró para que lo dicho por Zapatero en el retiro constituyera su última intervención y cierre de la cumbre, dejando en la opinión pública internacional la sensación de que, al fin, este anodino encuentro anual había encontrado rumbo -EL NEOLIBERALISMO- por supuesto que los presidentes revolucionarios no cayeron en la trampa. De manera que lo que dio pié a la molestia de Zapatero fue su propia inconsecuencia al intentar aplicar una viveza inaceptable. También la cancillería chilena, tomada por la iracunda e innoble derecha católica maniobró para que la última intervención fuese la del Presidente español. Ello quedó más que patente.

Lo que quedó como elemento marcante de la cumbre es el hecho de que se discutieron asuntos que facilitan para las cumbres próximas un debate álgido y desafiante para la derecha y el neoliberalismo en Latinoamérica. Las próximas cumbres se destacarán por ser una abierta confrontación de modelos y de ideologías. ¿O es el Norte o somos todos?. ¿Son los pueblos desarrapados o son los empresarios españoles?, ¿Es el afán mercantilista o es la inclusión social? ¿Es el comercio o es la pobreza el centro de atención?.

6) La molestia del Rey es la misma historia; su desplante, al retirarse de la sala, muestran que no pudo soportar las censuras a las inmoralidades de Unión FENOSA (joya de la corona). El personaje no da mucha harina para moler, así que en dos líneas se resume y se entiende su iracunda y “divina” reacción. Chávez no contestó a su grosera actitud templaria y eurocéntrica.

7) Las cancillerías española y chilena han obrado pésimamente al hacerle el juego a Aznar y a la CEOE pues abrieron la caja de Pandora. ¿Cómo evitar el próximo año el encontronazo?. Es posible que a estas horas las reprimendas de Moncloa a Moratinos y a Doña Trinidad Jiménez hayan sido de película, pues el problema es que las cumbres seguirán efectuándose, y de que forma, suponemos. El próximo año el anfitrión será nada menos que el señorito Saca, así que los revolucionarios han de estarse frotando las manos. Del otro lado, el inefable Aznar ha hecho mutis, haber maniobrado para enfurecer a Chávez y al final, poner en ridícula posición a Borbón le traerá no pocos inconvenientes y la CEOE será más cauta en adelante.

En conclusión, monumental fracaso para las cancillerías de España y Chile y una tremenda oportunidad para las corrientes transformadoras en Latinoamérica al haber recibido este regalo inesperado, el debate seguro.

Anónimo dijo...

El anterior comentario es mío, el del fondo del asunto.
Edgar.
salud y revolución.